martes, 20 de diciembre de 2016

Recreación del mito de pandora

Todos me habían advertido que no la abriera, pero mi curiosidad por ver la gravedad que provocaban todas las atrocidades me supero, yo sabía que en esa caja estaban todos los males y quería verlos en todo su esplendor. El mundo estaba demasiado lleno de amor y felicidad entre otras cosas, eso me asqueaba, odiaba ver tanta luz en el mundo.
Todo comenzó cuando Prometeo decidió traicionar a los dioses devolviendoles el fuego a los mortales.
En este momento yo fui creada para una cosa: venganza. Zeus pidió que me crearan para persuadir y seducir a Epimeteo. Cuando llegué a su puerta traje conmigo la jarra/caja, el al verme se enamoró de mi.  Pobre idiota,  no supo a tiempo que  conmigo no conseguirian lo que buscaba, para mi el hecho de querer a alguien es nulo, esas cosas no tienen sentido para mi existencia.

Debo abrir la caja, ya no lo soporto, tanta bondad me esta consumiendo. Se que Zeus se enojara conmigo y se que tendre un castigo pero debo de intentar quedar bien con lo que haga, culparé a mi curiosidad y eso creo que me ayudara a que mi castigo sea menor o por lo menos a que no me maten, pero no puedo seguir con esto, ya no más, tendré que afrontar las consecuencias, pero tengo que hacerlo.

maravilloso, simplemente hermoso, cuando logré abrir la caja pude ver en todo su esplendor a la maldad… lo más gracioso es que cuando logre hacerlo, algunas de las atrocidades que había dentro fueron directo a la cara de Epimeteo dejándolo ciego, pobre idiota.. El no sabia en donde se había metido.
No me arrepiento de nada. Al momento que abrí la caja Zeus apareció a cerrarla, intenté justificarme con mi curiosidad y él fue piadoso conmigo, ahora mismo me encuentro encadenada en las fosas debajo del olimpo. Apenas me alimentan, me quieren viva solo por los “poderes” que poseo, no todos tiene tanta sensualidad o persuasión para enamorar a los dioses cómo yo, aunque eso no me es suficiente para que me dejen en libertad.

Los días pasan y yo sigo aquí marchitandome cómo una flor, si tuviera la oportunidad, estoy segura que no volvería atrás, me gusta lo que hice, ame ver cómo por unos minutos el mundo se vino abajo por algo que yo hice, esa destrucción que cause me provocó un éxtasis que ninguna otra cosa había provocado en mí antes. Gracias Prometheo, lo que tu hiciste generó que yo me sintiera viva por lo menos una vez en la vida.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario